El gran desafío es tener que inhalar miseria, corrupción, odio y violencia, metabolizarlo todo con ideología y amor y exhalar tolerancia para ayudar a construir la armónica paz. Ernesto Kahan Vengo de visitar las esquinas del dolor (A mi querido y respetado amigo Ernesto Kahan) ¿Y qué pasa con esos que no tienen oídos para oír, y te cierran las compuertas de sus almas, con esos que creen lo que ellos mismos cantan? Y qué pasa con esos laureles de paz colocados en cabezas que solo esperan fama, con esos que no escuchan las canciones del alma, con esos que creen cantarle a la justicia, y brillan sus botas en las esquinas del placer? Si el gran desafío es inhalar miseria, Corrupción, Odio, Violencia. Metabolizarlo todo con ideologías de amor, exhalar tolerancia, aumentar la bondad en corazones fríos, calmar el delirio de los poderosos, y limpiar lacras sin temor a contagiar las manos. Esas manos que acarician sus propios rostros. Rostros que se miran mucho al espejo buscando la belleza de la piel en lugar de sondear la belleza del alma. Escribo en el limbo del dolor, Es que sé que el sentido de la vida queda atrapado en el papel de un poema, en las ondas del aire que resuenan en el desierto, colocando muecas en el perfil del tiempo perdido. No me contradigan, lo suplico, que hoy vengo de visitar las esquinas del dolor y la sangre. Carmen Amaralis Vega Olivencia |